El enemigo es El Conflicto [imagen El Conflicto], y en algunos casos es un enemigo brutal, despiadado; como Saturno, capaz de comerse a sus hijos; es el Apocalipsis. Partimos, pues de una concepción determinada del conflicto, como dañino para las personas y las relaciones.

El Conflicto

No podemos intervenir en los conflictos si primero no entendemos qué elementos entran en juego, y cómo nace, crece, se mantiene, disminuye y muere El Conflicto. Conlleva, por tanto, la necesidad del estudio de las resistencias a la apertura a la solución y superación del mismo.

Por encima de la limitada visión de que el conflicto viene por posiciones encontradas, y de que, si atendemos a los intereses de las partes, puede encontrarse fácil solución al mismo (el básico win-win), debemos atender cómo ambas partes van entrando en patrones recursivos de autoprotección que los lleva a defender a ultranza la posición propia.

El conflicto se puede volver tan irracional que las apelaciones a la racionalidad no tienen efecto. Acabamos siendo manipulados por el propio Conflicto hacia una guerra entre nosotros, con grandes costes personales, económicos y daños colaterales. Sin pretenderlo, acabamos convertidos en marionetas del Conflicto, en sus mejores y más temibles aliados.

El Conflicto y las partes como marionetas

Daño, Amenaza y Oportunidad, sean estos reales o efecto de una distorsión o error de percepción de las partes, son los tres activadores del Conflicto. Básicamente, si entramos en conflicto es para suprimir esa amenaza, en busca de una compensación por el daño sufrido o para obtener algo que deseo (oportunidad), o una sume de los tres.

Su activación supone el bloqueo de la Compasión, nuestra natural tendencia a ver y sentir al otro como alguien próximo a nosotros, y la activación de nuestras respuestas defensivas más rígidas, aquellos que llamamos en este modelo Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis del Conflicto , que, aupados por éste, van a encadenarnos al Conflicto y nos van a impedir la salida del mismo.

Daño, amenaza y oportunidad

El trabajo desde este modelo de Intervención motivacional en conflictos busca superar esas dificultades y resistencias, tomar conciencia del papel que cada una de las partes tiene en el mantenimiento y/o en el agravamiento del conflicto, y trabajar para generar una alianza que ayude a los clientes a superarlo juntos.

Partes atacando al conflicto